Empiezan a llegarnos, junto con los resultados, las primeras crónicas de los encuentros y hay algunas, muy trabajadas y divertidas, que merecen ser destacadas en este blog. Como por ejemplo, la que nos ha llegado de Carlos Moreno narrando su partido contra Roberto Fernández.
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El encuentro se disputó a las 10:00 a.m. en un día soleado y sin viento que pudiese favorecer a alguno de los contrincantes, el partido arrancó con respeto y cierto temor en ambos contrincantes que se vio reflejado con un arranque soso, sin público, y con una evidencia clara de buen tenis, a medida que el set fue avanzando ambos contrincantes empezaron a mostrar su mejor tenis, debido a lo anterior la gran afluencia de público se hizo evidente colapsando las gradas y aledaños provocando la actuación de los conserjes con la finalidad de asentar al público en sus respectivas butacas, finalmente el primer set, muy disputado todo hay que decirlo, se decantó por el que redacta con un 7-5 cerrando un buen comienzo de partido.
Durante el descanso hicieron aparición las demandadas cheerleaders que la organización puso a disposición, provocando entusiasmo y alzamiento de más de alguno de los presentes, la diversión estaba garantizada, las cervezas, los bocatas y la banda municipal no paraba de hacer sonar sus instrumentos musicales entonando el Asturias patria querida en algunas ocasiones y el Madrid, Madrid, Madrid castizo en otras. Se echo de menos la presencia de Sakira como se había prometido, pero en su lugar tuvimos a Kristina Estekeli (ya la organización que lo escriba bien) bailando el pumba, pumba que no te pago porque estoy más tiesa que el palo de un churrero, que es similar al wuka wuka, pero a nivel local y sin blanca.
Después de tan bello espectáculo el que redacta y prendido de los encantos de la jovencísima bailarina embrujando con su mirada y su excitante vestimenta y esas mallas de leopardo, comencé un segundo set más centrado en la grada que en la pista. Mi Carmen de Mairena no paraba de hacerme guiños y giros de cadera que me desconcertaron provocando un comienzo de segundo set con mucha relajación del redactor y para mi desgracia con soltura del oponente proyectando derechas inalcanzables lo que supuso un claro 6-3 a favor de Roberto.
Finalmente el emocionante tercer set se disputó con un Roberto subido de moral y con confianza que se tradujo en un rotundo, aplastante, contundente y rapidísimo 6-1 a su favor, finalizando así la segunda jornada de ambos contrincantes con una clara victoria de Roberto.